Un poquito más de mi...

Hoy, quiero compartiros algo muy especial.

Esta frase la usamos muchas veces en nuestra familia, cuando las cosas se ven muy negras y no parece que vaya a tener solución.

En nuestra vida, muchas veces pasamos por momentos en los que nos da la sensación de estar metidas en un túnel negro sin salida y que nunca llegamos a ver la luz al final, sin embargo, por muy negras que veamos las cosas, casi siempre tienen solución, el problema es que estamos tan inmersos en la oscuridad que no dejamos entrar el rayo de sol.🌞

Durante la maternidad/paternidad estas situaciones se multiplican: cuando aparecen las grietas en la lactancia y no deja de doler, cuando nos sentimos desbordadas por el nuevo rol de madre, cuando nuestro bebé no gana peso, cuando iniciamos alimentación complementaria, cuando elegimos colegio , cuando nos incorporamos a trabajar....y así podría hacer una lista interminable.

💝 En nuestra pequeña/gran familia, cuando las cosas se ponen negras usamos esta frase de la película Shakespeare in love, porque nos devuelve a la realidad y nos enseña que al final del túnel siempre aparece la luz.